
Esta tierna historia de un hombre llamado Mister Empty plantea los temas de la soledad y el aislamiento. Mister Empty recorre la ciudad buscando sentirse satisfecho con diferentes cosas. El trabajo no le hace feliz. La comida no le hace feliz. Las obras de arte en las paredes de la galería local no le hacen feliz. Las aves en la pajarera tampoco le hacen feliz. Su creciente sensación de aislamiento e insatisfacción se representa de una manera cálida y sofisticada. Un día se topa con alguien que está tan vacío como él, y se forma una conexión de amor entre ellos. Este cuento engañosamente simple es un excelente ejemplo del poder de contar historias sin palabras; el lector adquiere una gran cantidad de información sobre Mister Empty sin la necesidad de una sola palabra. El libro de ilustraciones abre un maravilloso camino para discutir el tema de la soledad y la necesidad de amor y compasión en nuestra vida cotidiana. ¿Cómo puede funcionar la sociedad si tan solo un ciudadano está tan solo como Mister Empty? El final de suspense permite que los lectores de 12 a 15 años especulen sobre lo que sucederá a Mister Empty después de que se encuentre con un transeúnte que le hace sentir completo nuevamente.